EL REIKI
El Reiki es un sistema de curación, basado en el uso de la energía universal y que se utiliza para armonizar el cuerpo y mejorar la salud de uno mismo y de los otros.
Este sistema proviene del Japón, a principios del s. XX de la mano del maestro budista Mikao Usuii. La palabra Reiki tiene un doble significado, por un lado se refiere a la energía universal que existe en todos y cada uno de los rincones del universo (Rei) y por el otro se refiere a la energía vital que se encuentra en cada uno de los seres vivos (ki).
La terapia, de 45 minutos de duración aproximadamente, consiste en que el terapeuta, con la colocación de sus manos a pocos centímetros del cuerpo del paciente, que se encuentra cómodamente estirado, recorre los diferentes centros energéticos que tiene el cuerpo, para curar posibles dolencias. Estos centros energéticos llamados chakras (denominación utilizada en varias corrientes filosóficas y religiosas como el hinduismo o el budismo) son los encargados del buen funcionamiento del cuerpo. Así cuando un centro energético se encuentra desequilibrado es señal que hay un órgano o parte del cuerpo que puede estar afectado.
A diferencia del que comúnmente se conoce como un sanador, el cual utiliza su propia energía para curar al paciente y después de la sesión permanece totalmente agotado por el esfuerzo, en el Reiki la energía llega al terapeuta como si de un canal se tratase, un canal a través del cual circula la energía curadora, por la cual cosa después de la sesión no ha de notar ningún desfallecimiento, todo lo contrario, hacer una sesión de Reiki es beneficioso tanto para el paciente como para el sanador pues éste último siente una sensación de tranquilidad y bienestar después de realizar la terapia.
El Reiki no se encuentra asociado a ninguna religión y no tiene ningún líder o cabeza visible por la cual cosa se descarta que se convierta en una terapia que se pueda vincular a una secta.
Actualmente la percepción que tiene la gente del Reiki ha cambiado y el desconocimiento y posible desconfianza ha estado mitigada por el hecho que la medicina tradicional está dando a conocer (y reconocer) las ventajas de esta técnica.
En la actualidad se ofrecen a terapeutas de Reiki, la posibilidad de hacer prácticas en centros hospitalarios, a través de asociaciones de voluntarios de Reiki. Estas asociaciones guían y forman profesionales porque , de manera voluntaria, colaboren en diferentes áreas médicas. Así mismo los mismos hospitales imparten cursos de formación al personal sanitario y público en general para complementar juntamente con la medicina tradicional determinadas dolencias. El Reiki se ha comprobado efectivo para combatir los efectos secundarios del tratamiento contra el cáncer (quimioterapia, radioterapia, etc.), disminuyendo el malestar general, las nauseas.
El Reiki trabaja no sólo a nivel físico del paciente sino en su campo emocional, mental y espiritual por la cual cosa la persona que lo recibe siente después de unas sesiones pequeños cambios en su manera de ver la vida, más positiva y con más empuje. Es especialmente efectivo para combatir situaciones de depresión, insomnio, nerviosismo entre otros.
Desde mi experiencia con el Reiki ahora hace ya 7años he podido sentir que realmente me ha ayudado en diferentes etapas de mi vida, me ha ayudado a mi misma y he podido ayudar a las personas que me rodean. Me satisface saber que las personas a las cuales he hecho Reiki me han mostrado su confianza y han experimentado mejoras en su salud y han podido sentir esta maravillosa energía en su cuerpo y en su alma.
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